El proyecto surge como un tercer espacio que emerge en medio de la cotidianidad bogotana, y establece una nueva experiencia a los usuarios caracterizada por el entorno natural planteado. “Diagonal botánica” busca romper con la ortogonalidad mediante quiebres compositivos que generan nuevos recorridos de carácter contemplativo (que guían a los visitantes en medio de una atmósfera alternativa) y, finalmente, llevan a una nueva plaza destinada a la realización de actividades de distintas dimensiones. En todo el nuevo espacio planteado, la piedra, en distintas dimensiones y orígenes, es la protagonista pues genera juegos visuales y de texturas al recorrerla y mediante tratamientos de iluminación y tamaño busca alterar la percepción del cuerpo en el espacio.